Llevo bastante tiempo con un gran dilema moral respecto a
las redes sociales. Creo que es algo que nos pasa a los que estudiamos algo
relacionado con el mundo de la comunicación. Como jóvenes que somos, y
curiosos, muchos de nosotros comenzamos a utilizar redes sociales por
curiosidad o como forma de expresión, compartir, contactar o conocer a otras
personas. Llegados a un punto clave en nuestra carrera estudiantil
universitaria ya comienzan a enfocarnos laboralmente y claro, las redes
sociales como facebook, twitter o blogs, es algo en lo que se esfuerzan en
advertir en nuestro sector. Sé que no hace falta que hable del poder que tienen
estas nuevas herramientas y sus consecuencias en el tiempo, etc, etc.
Mi dilema comienza cuando insisten en que enfoquemos
nuestras cuentas al sector al que nos queremos enfocar, que es una buena
herramienta de encontrar empleo, y claro, todos sabemos la situación por la que
vivimos la “generación más formada de todos todísimos tiempos”, en la que
cualquier vía es una opción no rechazable. ¿Qué se supone que debo hacer con
todas mis redes sociales? ¿Debo comenzar a comportarme como una persona que
simplemente informa de ciertos temas?¿ Borrar todo el historial que pueda haber
sobre mi? Yo admito que quizás exagero, pero para mí es una gran preocupación.
No me avergüenzo de las cosas que publico en twitter, instagram o facebook,
osino no lo haría, pero tampoco quiero que eso me cierre algunas puertas, sé
que la seriedad no es algo que brille en su esplendor en mi caso. Es frustrante.
Ya hace un tiempo di un paso en cambiar mi usuario de
twitter, pasé de llamarme como este blog, @sofuckingme (aprovecho para advertir
a maliciosos que quieran utilizar ese nombre que me creé otra cuenta para
mantenerlo, por si algún día me apetecía utilizarlo) , a @jlprzarroyo, algo que
se suponía que era más serio y profesional. Pero yo realmente me planteo si
esto es lo correcto, ¿por qué se supone que “eso serio” significa que yo seré
mejor que otro? Sé que alguien que publique en una red social lo que está
comiendo, que se va a dormir la siesta o que le duele el dedo meñique del pie,
no es algo serio y yo admito que ni se me pasaría por la cabeza contratarlo
para cualquier cosa, pero no porque sea serio o no serio, sino porque me parece
de personas con cierto nivel mental- 2.0 algo limitado.
Creo que han incrustado en mi el virus de la inseguridad y
el miedo en hacer algo que pueda parecer (me vuelvo a repetir) poco serio. Es
un continuo miedo a que no voy a parecer de cara a la sociedad una persona de
fiar, con actitudes y aptitudes, falta de criterio o potencial para hacer algo.
Sin embargo este ‘chip’ la verdad que en mi cerebro funciona a medias, la
verdad que no voy a seguir los consejos que me han dado de realizar una cuenta
profesional y otra personal.
Dejadnos disfrutar de
lo que hacemos (siempre que lo hagamos con cabeza y un poco de ingenio). A mi
particularmente me encanta leer cuando algún ‘personaje’ público, profesional, o
‘conocido’ demuestra su ingenio, creatividad o incluso ironía o picardía, y no
se basa en publicar una serie de contenidos totalmente programados mediante
aplicaciones en las que se explaya en los lectores una información que sí, que
es útil, pero no creo que esa sea la forma correcta cuando creamos nuestra
propia marca personal.
Sin embargo, como siempre finalizo un post, seguiré
divulgando, quién sabe lo que acabaremos haciendo en un futuro… Mientras tanto
creo que voy a dejar de frustrarme por ese futuro tan incierto que nos repiten
cada día.
"Es fácil reconocer si el hombre tiene gusto: la alfombra debe combinar con las cejas." - Salvador Dalí